domingo, 26 de enero de 2014

Abanicos de invierno

Como me están cansando los días grises, he decidido retomar el tema de los abanicos y por extensión el blog, a ver si así pongo un poco de color a este invierno que no se muy bien porqué pero se me está haciendo largo laaargoooo... y eso que me falta tiempo para todas las cosas que quiero hacer.

Estoy dedicando bastante tiempo al Grado de estilismo e indumentaria en el que estoy matriculada y los abanicos los retomo de tarde en tarde, pero no los pienso abandonar.

Rocío quería hacer un par de regalos especiales y habló conmigo para que fuesen abanicos, por lo que ante todo gracias Rocío por confiar en mi. Ella sólo me dijo que; uno fuese alegre pero que no tuviera ningún motivo definido y otro elegante. La verdad es que yo lo paso mal pensando si le gustará o si no... y hasta que no me dijo que gustaron no respiré tranquila.


Abanico de madera de peral y país de algodón

Las directrices que me dio Rocío eran ideales para utilizar pinturas de seda y acuarelas; para que el resultado final fuese liviano. Me encanta darle libertad a este tipo de pintura porque a veces ella sola hace unas mezclas muy sutiles y delicadas que personalmente me gustan mucho.


Abanico de recorte


La opción del "elegante" la tuve clara desde el principio, hojas de acanto que las veo muy señoriales. Este diseño me parece perfecto para alguien más clásico como era el caso.


Abanico de madera de peral pintado a mano

Según me han comentado han gustado mucho a sus dueñas, así que estoy encantada y espero verlos muy pronto en acción.