Como me están cansando los días grises, he decidido retomar el tema de los abanicos y por extensión el blog, a ver si así pongo un poco de color a este invierno que no se muy bien porqué pero se me está haciendo largo laaargoooo... y eso que me falta tiempo para todas las cosas que quiero hacer.
Estoy dedicando bastante tiempo al Grado de estilismo e indumentaria en el que estoy matriculada y los abanicos los retomo de tarde en tarde, pero no los pienso abandonar.
Rocío quería hacer un par de regalos especiales y habló conmigo para que fuesen abanicos, por lo que ante todo gracias Rocío por confiar en mi. Ella sólo me dijo que; uno fuese alegre pero que no tuviera ningún motivo definido y otro elegante. La verdad es que yo lo paso mal pensando si le gustará o si no... y hasta que no me dijo que gustaron no respiré tranquila.
| Abanico de madera de peral y país de algodón |
Las directrices que me dio Rocío eran ideales para utilizar pinturas de seda y acuarelas; para que el resultado final fuese liviano. Me encanta darle libertad a este tipo de pintura porque a veces ella sola hace unas mezclas muy sutiles y delicadas que personalmente me gustan mucho.
| Abanico de recorte |
La opción del "elegante" la tuve clara desde el principio, hojas de acanto que las veo muy señoriales. Este diseño me parece perfecto para alguien más clásico como era el caso.
| Abanico de madera de peral pintado a mano |
Según me han comentado han gustado mucho a sus dueñas, así que estoy encantada y espero verlos muy pronto en acción.